Pérdida auditiva: ¿Qué hacer en caso de pérdida repentina de audición?

Si la capacidad de oír disminuye de repente, si los problemas de audición o incluso la pérdida de aud ición aparecen de forma inesperada, la causa puede ser una pérdida de audición súbita. Los ruidos en los oídos o incluso una presión desagradable pueden ser los primeros indicios, por lo que deben tomarse siempre en serio para evitar daños permanentes en la audición.

Por ello, a continuación nos gustaría profundizar en el tema y aclarar las cuestiones de cómo se produce la pérdida de audición súbita, cuáles pueden ser sus causas y qué puede hacer si se ve afectado.

¿Qué es la sordera súbita?

Es la aparición repentina de una pérdida auditiva neurosensorial. Los problemas auditivos (hipoacusia neurosensorial) o la pérdida de audición se producen, por lo general, sin una causa evidente, como una enfermedad o un ruido. Por ello, también se denomina infarto de oído. Los problemas suelen producirse en un lado, es decir, en un oído. Mientras que algunas personas apenas notan la pérdida de audición, otras tienen síntomas perceptibles.

Cómo reconocer una pérdida auditiva súbita ¿Cómo reconozco que tengo una pérdida auditiva súbita?

En muchos casos, la pérdida de audición súbita se produce de forma muy repentina. Llega de forma inesperada y comienza con un zumbido en los oídos(tinnitus). Suele ir seguido de pérdida de audición o, en casos graves, hipoacusia. A menudo, determinadas gamas de tonos, es decir, tonos bajos, medios o altos, se perciben peor. Por ello, también se distingue entre hipoacusia de baja frecuencia, hipoacusia de frecuencia media y hipoacusia de alta frecuencia.

Otros posibles síntomas de la pérdida de audición súbita son

  • una sensación sorda en el oído
  • sensación de congestión del oído ("algodón en el oído")
  • Las voces, la televisión, la música, etc. suenan extrañas.
  • Acúfenos u otros zumbidos en los oídos
  • Mareos o pérdida del equilibrio
  • Raramente: Otalgia acompañante

La pérdida de audición puede producirse a cualquier edad, tanto en hombres como en mujeres. Sin embargo, la edad más común es alrededor de los 50 años. Es muy raro que los niños sufran una pérdida de audición súbita.

Para muchas personas que sufren una pérdida de audición repentina, los síntomas remiten y desaparecen al cabo de unas horas o días. No obstante, si reconoce los síntomas, debe consultar a un otorrinolaringólogo para obtener más aclaraciones.

¿De dónde procede la sordera súbita?

Es una forma de pérdida repentina de audición en el oído interno. Las causas no suelen estar claras. Entre los factores que se consideran posibles desencadenantes en medicina e investigación se incluyen el estrés o las infecciones víricas, así como los trastornos circulatorios en el oído interno. Otros motivos que se barajan para la pérdida de audición súbita son las enfermedades autoinmunes, enfermedades como la enfermedad de Menière (vértigo rotatorio de tipo convulsivo) o traumatismos por ruido.

Una pérdida repentina de audición no siempre es la causa de un empeoramiento repentino de la audición. El cerumen en el conducto auditivo externo también puede provocar un sonido sordo en el oído. Un otorrinolaringólogo puede determinar fácilmente la causa realizando un examen.

Diagnóstico de la pérdida de audición:

Una pérdida de audición repentina no es una urgencia médica, pero debe consultar a un médico en cuanto aparezcan los síntomas típicos para recibir un diagnóstico rápido y un tratamiento adecuado. Esto es importante para evitar daños a largo plazo como la pérdida de audición.

Con una serie de exploraciones y descartando otras enfermedades, el otorrinolaringólogo puede determinar si se trata de un caso de pérdida de audición súbita.

Al elaborar su historial médico, su médico le preguntará sobre sus síntomas, posibles enfermedades y también sobre su estilo de vida. A continuación le examinará detalladamente los oídos. Esto permite descartar otras causas de pérdida de audición, como el cerumen.

Una otoscopia u otoscopia proporciona información sobre la salud del conducto auditivo externo y el tímpano. La timpanometría también puede ser útil. Examina el estado del oído medio o, más concretamente, la movilidad del tímpano, así como la cavidad timpánica (tímpano) y los huesecillos.

Las pruebas de audición pueden ser útiles para realizar exámenes adicionales como parte del diagnóstico de la pérdida de audición súbita.

Para descartar posibles infecciones e inflamaciones como causa de la pérdida de audición, el médico puede tomar muestras de sangre para realizar un análisis.

Si la pérdida de audición se produce repentinamente y no tiene una causa reconocible, el diagnóstico suele ser pérdida de audición súbita.

¿Cuánto dura una pérdida de audición súbita?

La duración de una pérdida auditiva y sus síntomas pueden variar en función de la gravedad y la causa.

En muchos casos, la mejoría se produce en 24 horas. Los síntomas desaparecen por sí solos. Sin embargo, la recuperación completa también puede tardar bastante más, hasta 14 días, siempre que reciba el tratamiento adecuado. Como ocurre con muchas otras enfermedades, cuanto antes se acuda al médico y se inicie el tratamiento, mayores serán las posibilidades de curarse o acortar el tiempo de curación.

¿Cómo se trata la pérdida de audición súbita?

El tratamiento de la pérdida de audición súbita suele depender del diagnóstico de un otorrinolaringólogo y de las causas respectivas. El médico decide qué método de tratamiento promete las mejores posibilidades de recuperación.

El tratamiento suele llevarse a cabo con altas dosis de guocorticoides, entre los que se incluye la cortisona. Los comprimidos de cortisona están destinados a aliviar los síntomas de la pérdida de audición súbita y favorecer la curación.

Si los síntomas no mejoran a pesar del tratamiento y se produce una pérdida de audición permanente o neurosensorial, suele ser necesario utilizar audífonos o prótesis auditivas electrónicas como los implantes cocleares.

Prevenir la pérdida de audición súbita: Prevención

Aunque no se pueda prevenir directamente una pérdida de audición súbita, existen algunas recomendaciones que pueden ayudar a reducir el riesgo:

  • Reduzca el estrés en la vida cotidiana: a menudo se diagnostica que el estrés es la causa de la pérdida de audición súbita. Por lo tanto, permítase suficiente relajación y descansos en la vida cotidiana y también duerma lo suficiente. El ejercicio regular también puede ayudar. Su audición se lo agradecerá.
  • Evite el ruido: la música alta, el ruido de la calle, el ruido en el trabajo, etc. pueden hacer que su audición se resienta. Los protectores auditivos pueden ayudar.
  • Lleva una dieta sana: Un estilo de vida y una dieta sanos son la base de un cuerpo sano. Esto también se aplica a los oídos.
  • Hágase revisiones auditivas periódicas: Las revisiones y pruebas auditivas periódicas ayudan a reconocer posibles enfermedades y problemas auditivos en una fase temprana.